La inversión para adquirir este vehiculo fue de 630 mil dólares aportados por el metro de Medellin y EPM. Se calcula que una sola de estas unidades contribuya a disminuir 60 toneladas de CO2 al año.
Al igual que los otros articulados del sistema, este tiene una longitud de 18 metros y una capacidad para transportar hasta 160 pasajeros, de los cuales 33 pueden ir sentados. El peso bruto del vehículo eléctrico es de 20 toneladas.
Metroplús informó que durante las primeras semanas el bus funcionará solo en horas valle, mientras se termina de capacitar a todos los conductores del sistema, y luego hará el recorrido en el horario habitual de la operación comercial entre las estaciones Aranjuez y Universidad de Medellín. Para las subidas se cuenta con un sistema especial que facilita el ascenso.
El FK1 puede superar pendientes con un 17 % de inclinación, lo cual es garantía de que podrá subir sin problema algunos tramos de la línea 1 de buses que llegan a tener hasta un 16% de inclinación.
“Si bien el articulado ha sido llamado prototipo, la tecnología ya fue probada, está madura y no requiere más pruebas. Lo que estamos haciendo es observando el modelo financiero, los costos de la operación”, manifestó. Con esta información, el Metroplús pasaría un plan de costos al Municipio de Medellín, que es quien financia la adquisición de los vehículos de este sistema que harán parte de la renovación de su flota.