“Uno de los retos más fuertes que enfrentamos hace 3 décadas fue el adecuarnos a una nueva realidad”.
“Hoy debemos iniciar la segunda gran transformación de nuestro sector”. J. R. Muñoz.
Pasión, dedicacion y compromiso por 29 años, han destacado la labor del maestro Jose Refugio Muñoz, Vicepresidente Ejecutivo de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), su tránsito por la organización más fuerte del gremio a nivel nacional se define -en sus propias palabras- como una gran satisfacción; por ello nos entrevistamos con él, en el marco del 30 aniversario de la Cámara.
“Uno de los retos más fuertes que enfrentamos hace 3 décadas fue el adecuarnos a una nueva realidad, pasar de ser un sector protegido por el gobierno a ser actores de nuestra propia historia, aunado a ello también vivir el proceso de adaptación de nuestras estructuras, junto con nuestro país, para incorporarnos a un mundo globalizado y asumir que hemos sido parte importante del desarrollo de esas cadenas globales de valor”, sostiene.
Para el orgulloso representante de los empresarios del transporte, el próximo aniversario representa el término de un ciclo que se inició no solamente en la CANACAR sino en el transporte. “Hace 30 años empezó la primera gran transformación de nuestra industria y hoy debemos iniciar la segunda gran transformación de nuestro sector para adecuarlo a las condiciones actuales, iniciando bajo el concepto de que el autotransporte de carga ya no es el único eslabón de la cadena logística, pero continúa siendo el más importante pues recordemos que el sector de la logística en nuestro país genera alrededor del 6% del PIB del cual el 3.2% es generado por el autotransporte de carga; a la vez implementar las herramientas tecnológicas e ir evolucionando a la par de ellas”.
En este sentido, el empresario también nos habló de la interacción que se ha dado con las autoridades de los tres niveles de gobierno, pues reconoce que la primera consideración es llevar a cabo una revisión profunda para delimitar las áreas de responsabilidad de cada uno de ellos. “El trabajo es desarrollar una política en la que cada nivel de gobierno se complemente, debemos buscar mecanismos que faciliten la movilidad de las mercancías y de las personas con mayor eficiencia y seguridad para generar condiciones de mayor competitividad en beneficio de nuestro país”, añade.
Finalmente, al indagar sobre el legado del Maestro José Refugio Muñoz en la CANACAR nos compartió que para las actuales (hoy algunas empresas de nuestra industria ya están siendo dirigidas por la tercera generación que tiene otra visión del deber ser del negocio del autotransporte) y futuras generaciones de transportistas debe ser muy valioso aprender de las experiencias que se han acumulado a lo largo de los años.
“Mi consejo es que homenajeen a los empresarios que fueron los pilares de nuestra industria y que fundaron nuestra Cámara, que sigan reconociendo sus orígenes y con ello el gran potencial que históricamente hemos tenido; que tomen como un arma poderosa nuestra capacidad de adaptación y evolución para que continúen ofreciendo a nuestro país un autotransporte de carga seguro, eficiente y competitivo. En resumen, que vean en la CANACAR el instrumento perfecto para el desarrollo de las empresas y de nuestro país”, manifestó el directivo.