Editorial

La descarbonización es un concepto fundamental contra el calentamiento global

La descarbonización es un concepto fundamental contra el calentamiento global

Sus impactos son devastadores en el medio ambiente, salud pública y en la economía global.

De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y con el El Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), se sabe que la generación de emisiones netas durante 2021 en equivalente a dióxido de carbono se dividió de la siguiente manera: 9% fue generado por la eliminación de residuos sólidos, trata de aguas residuales, incinera y quema de residuos, así como tratamientos biológicos; 10% correspondió a las emisiones producidas por la industria de los minerales, metales, electrónica, uso de solventes y manufactura; el 9% fue producido por la industria del ganado que hace referencia a la fermentación entérica y gestión del estiércol.

Y en primer lugar, con una diferencia bastante grande, la industria de la energía produjo el resto de las emisiones contaminantes. Fue la industria de la energía, transporte, petróleo y gas natural, en su modalidad de manufactura y construcción y otros sectores.

Cabe señalar que a pesar del ser el transporte el segundo mayor productor de emisiones dentro de las actividades de energía, el que más aporta es el autotransporte de carga y pasaje con el 94% de estas emisiones, equivalentes a dióxido de carbono al ambiente y el 6% restante es emitido por el ferrocarril, aviación y la navegación marítima.

Desglosando al transporte tenemos que el urbano es uno de los principales consumidores de combustibles fósiles y uno de los principales productores de CO2 al ambiente, por lo que la descarbonización en este rubro implica la transición hacia formas de movilidad más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Esto puede incluir la adopción de vehículos con tecnologías más limpias, disponibilidad y adopción de combustibles o energías más verdes, fomento de transporte público más eficiente y la promoción de modos de transporte no motorizados; entonces el objetivo es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas al transporte en entornos urbanos.

Por lo tanto, las soluciones para llegar a cero emisiones y promover la descarbonización serán crear una infraestructura que se dirija hacia los vehículos de batería, de celdas de combustible y de combustión interna a base de hidrógeno. La idea es pasar de euro 5 a euro 6, que equivale al 77% de reducción de Noxes y 60 % de  material particulado.

Aunque todavía veremos la participación del diésel por lo menos para los siguientes 10 años, creemos que irá disminuyendo su uso con la aparición de nuevas tecnologías de combustión interna, bajas en emisiones de carbono y por el aumento del costo y la complejidad de obtención del diésel. Aún veremos también conviviendo vehículos híbridos con soporte de un motor a diésel.

Otra opción viable para descarbonizar es la plataforma de motores agnóstica y así hasta llegar al final con vehículos cero emisiones.

Cummins en este contexto continúa con paso firme ante la descarbonización con productos innovadores y disponibles para la industria. Su proyecto Destination Zero es una realidad y seguirá innovando e invirtiendo para avanzar en el camino a 0 emisiones. La acción se requiere hoy, para impulsar nuestro camino a cero emisiones con pasos firmes.

FUENTE: CUMMINS