AMDA revela que hacia mediados de año la internación de vehículos usados al país ha experimentado su cifra más baja en la última década con una caída del 70% frente al mismo lapso de 2014, según las cifras que están basadas en información de la Administración General de Aduanas y la Secretaría de Hacienda, entre enero y junio pasados ingresaron al país 83 mil 464 unidades, las cuales representaron apenas 14% de las producidas y comercializadas en el país en el mismo periodo, que sumaron 609 mil 825 unidades, cuando en otros años el número de vehículos importados era superior al de unidades fabricadas y vendidas en el país.
Las cifras proporcionadas por los proveedores de autos señalan que de 2006 a 2008, el número de vehículos importados (al año) fue superior al de unidades producidas y vendidas en el país.
Por ejemplo hacia 2006 se vendieron un millón 139 mil 718 vehículos (fabricados en territorio nacional), pero se importaron un millón 575 mil 150 (cifra superior en 38%); en 2007 se comercializaron un millón 99 mil 866 unidades nuevas pero ingresaron un millón 291 mil 845 (17.5% más). En 2008 se vendieron un millón 25 mil 520 unidades contra un millón 31 mil 48 unidades importadas (0.5 por ciento más). De acuerdo con la AMDA, entre 2005 y 2014 se vendieron en México 10 millones 64 mil 601 unidades, elaboradas en las armadoras instaladas en territorio nacional, mientras en el mismo lapso ingresaron 7 millones 572 mil 96 unidades importadas, que equivale a 75 por ciento del total de unidades nuevas vendidas.
Sin embargo la cifra de autos importados disminuyó drásticamente a partir de 2009, cuando el gobierno de Felipe Calderón publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto en el cuál se estableció que para la importación definitiva se deberían cumplir con los requisitos de los tratados de libre comercio de los que México es parte y presentar ante la autoridad aduanera un certificado de origen, proporcionado por la compañía armadora.
En el caso de unidades para el transporte hasta de 15 personas; o tratándose de vehículos para transportar mercancías, de camiones hormigonera, entre otros, se estableció que podrán ser importados definitivamente al territorio nacional, aplicándose un arancel ad valorem de 10 por ciento. Y fue hacia diciembre del año pasado que el gobierno de Enrique Peña Nieto prorrogó el decreto hasta el 31 de diciembre de 2015.
Bajo este concepto la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) solicitó que tales medidas se mantengan «para evitar que estos vehículos continúen dañando el parque vehicular en circulación en nuestro país».
El reporte de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores señala que en junio ingresaron al país 15 mil 27 unidades, 67% menos que las 45 mil 241 que entraron en ese lapso de 2014. Por su parte este año han entrado 83 mil 464 vehículos, frente a los 273 mil 256 registrados en el primer semestre de 2014.